Mi Viaje por ETN

Este fin de semana estuve paseándome por la hermana república del chorizo, mejor conocida como Toluca, atendiendo unos asuntos familiares, como me fui solo, mi opción de regreso fue naturalmente el autobús, siendo una travesía donde me pasaron un sinfín de estupideces que se las relatare en las siguientes líneas.

Llegar a una central camionera donde no conoces nada ya de por si es complicado, pero hacerlo cargando tu maleta que no tiene rueditas es muy tedioso, así que con todo y maleta me dispuse a buscar una taquilla que tuviera salidas hacia mi destino, San Luis Potosí,  la primera opción fue la taquilla de Primera Plus, y ahí estuvo el primer fallo, pues la salida a san Luis estaba programada para las 8 de la noche… yo estaba en la taquilla a las 12 de día, así que tuve que buscar mas opciones,  después de ignorar algunas taquillas de camiones polleros me decidí a ir a la taquilla de ETN, donde fue lo mas viable pues el camión salía a las 2 de la tarde.

Cuando al fin conseguí el boleto, tuve que buscar algún pasatiempo, pues tenia que esperar la hora de salida, y el no tener reproductor mp3 en esos momentos no te da muchas opciones de distracción, así que me fui a buscar el puesto de revistas mas cercano.

La tienda no tenia mucha variedad, en realidad eran pocas las revistas que podían interesarme para leer, al final mi decisión fue leer la revista año/cero que tenia de regalo un pequeño libro sobre un tema teológico que tanto me llama la atención.

Así que me dispuse a esperar dos horas leyendo; estaba tan metido en mi lectura que ni siquiera me percate de que la sala de espera se llenaba cada vez mas de gente… no le di importancia y yo seguía con lo mío, hasta que llego el momento de una de las señoritas ( no se si llamarla azafata, por que esas son de los aviones, pero me da igual) nos indico que abordáramos la unidad, y yo cargando mi maleta pesada como la del pípila me dirigí a abordar.

Lo bueno de estos camiones es que tienes la opción de elegir ir en un asiento completamente solo, y esa fue mi elección, ir solo y casi enfrente de la televisión… ya sentado a mis anchas (valla que si) y me dispuse a viajar cómodo…  mi primer paso fue buscar los audífonos de mi asiento, por que para mi jodida suerte, todos tenían, menos el  mío… mi radar de supervivencia se activo, así que valiéndome madre, me levante, fui a los asientos desocupados y tome algunos audífonos… los primeros que probé… no funcionaron, los segundos, tenían un corto y se escuchaban mal, pero los últimos que tome, funcionaron ala perfección.

Una gran desventaja mía es que cuando voy en cualquier tipo de automóvil, y quiero leer, me mareo, así que mejor decidí ver las películas que el operador tenia preparada para los pasajeros en este viaje que duraría alrededor de 6 horas.

Antes de la película, tuvimos que chotearnos unos spots sobre el bicentenario y el centenario aquí en México… de mala calidad pero al fin spots, y así inicio mi viaje… la primer película era una producción gabacha de que nunca estuvieron en el cine fuera de EU, La película se titulaba “21” una historia sobre un estudiante de 21 años, de esos superdotados en cuestiones matemáticas,  es invitado por su profesor a ingresar a un grupo de contadores de cartas de póker en un juego que también se llama 21, el objetivo de esto es timar a varios casinos de las vegas, este chavo se ve obligado a hacerlo para pagar su carrera en Harvard… la verdad una muy buena película, la trama es sensacional y el final tubo buenos tintes ingeniosos, muy recomendable esta película.

En primera impresión no me había decepcionado, la película fue buena y esperaba a que la tendencia siguiera igual, mientras empezaba la otra película, decidí comer el lunch que nos daba la línea de autobuses, esperaba algo mejor, pero tuve que tomarme mi refresco caliente, unas galletas de marca genérica y un yogurt de fibra… antes recuerdo que nos daban una trota un refresco de 600ml y unas sabritas… como han decaído los servicios.

Después de disfrutar ese bocadillo, inicio la segunda película del viaje… empezó la cortinilla de Disney, pensé que seria tal vez alguna comedia… pero no, la tortura era inminente… pusieron la película de los Jonas Brothers… Maldita sea, yo me había negado rotundamente a ver esa película por cualquier jodido motivo, pero al estar en la situación de no tener sueño, no tener música o algún videojuego con que distraerme, decidí como los hombres soportar tal tortura visual.

Y hasta eso la película no fue mala, la chava protagonista, es buena, creo que lo único bueno fueron las chicas de la película todo lo demás, apesto, la trama fue mala, el tema muy predecible, nada ingenioso, fue la clásica historia de Disney con sus finales felices, y lo corroboro, los Jonas Brothers APESTAN!!!

Después de superar tal Tortura que se combino con el trasbordo que tuvo el camión en Querétaro, una pequeña parada donde algunos pasajeros bajaron y otros nuevos subieron, lo bueno fue que el camión iba casi vacio  aun mas relajado podía estar en mi amplio asiento, con el camión en movimiento, en el espacio del spot decidí pararme al baño, pues tenia necesidades por hacer, ¿saben lo complicado que es hacer de tus necesidades en un baño en movimiento?... es muy complicado, lo bueno que mi destreza me permitió hacerlo sin ningún problema y sin hacer un maldito mojadero por  todos lados… al salir, me percate que el camión también tenia una pequeña cafetería, así que me dije a mi mismo, “un cafecito no caerá mal” ¿Cuál fue mi sorpresa? Que la estúpida cafetería no tenía nada, ni vasos  ni agua y mucho menos café o algún pequeño bocadillo… mi decepción fue tanta que volví a mi asiento solo con las ganas de ver una película de calidad y así pasar ese trago amargo.

Empezó una cortinilla de DreamWorks , la película seria una buena producción… y lo fue, la película era “Eagle Eye” donde el protagonista (que no me acuerdo de su nombre) es el que sale en Tranformers; la verdad me sorprendí, es una gran película, solo que para mi desgracia en la parte medular de esta historia… llegue a mi destino, y sin decir “agua va” el operador apago la TV y no supe cual fue el final, por eso mismo no les cuento la película, pero se las recomiendo; ahora me veré obligado a rentarla, pues me quedo la duda del final.

Baje del camión, recogí mi maleta y me largue de la estación…

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La verdad un buen viaje, el autobús cómodo, la verdad que buen servicio el que me dieron, pero si, siempre tiene que haber negritos en el arroz… que fueron esos detalles malos.

Como nota, Tan mala esta la película de los jonas, que cuando la veía estaba pensando en escribirles este articulo.